La revista que pasa Caplan a las empresas árabe y sionista antes de 1948 encaminadas a resolver pacíficamente sus diferencias evidencia una desconocida disposición al compromiso por ambas partes. Tanto nos hemos acostumbrado a pensar en el conflicto árabe-israelí en términos militares, que puede sorprender seguir las negociaciones en detalle. Estas iniciativas no fueron empresas opacadas; entre los notables implicados, estaban Chaim Weizmann, Felix Frankfurter, H. St. John Philby, T.H. Lawrence, David Ben-Gurión, Abba Ebán, el rey Abdalaj de Jordania, el monarca de Arabia Saudí Ibn Saud y el rey Faisal de Irak. Con cada volumen, el meticuloso análisis de Caplan ocupa alrededor de la mitad del texto, dedicándose la otra mitad a publicar (a menudo por primera vez) todos los documentos conocidos relativos a esta materia. Tan exhaustivo es Caplan que en un caso (la crónica de un encuentro acaecido en 1921 entre las delegaciones británica, árabe y sionista) aporta tres juegos de transcripciones. Es la versión definitiva del tema.