¿Cuántos Musulmanes residen en los Estados Unidos?.
Hasta este momento, básicamente, nadie tiene ni idea. Por ley, el Census de los Estados Unidos no puede hacer preguntas acerca de la religión. Hay también un montón de otras dificultades a la hora de llegar a una cifra, empezando por el problema de definir quién es un Musulmán: ¿Debe uno incluir a los Musulmanes fuera de la media como Louis Farrakhan y Druze?
La incertidumbre ha generado cifras variadas ampliamente divergentes. Un gran examen demográficos en 1990 contabilizó 1,3 millones de Musulmanes. En 1998, un periódico Pakistaní elevó el número hasta los 12 millones. Incluso el Yearbook of American and Canadian Churches generalmente una autoridad en la materia halló 527.000 Americanos Musulmanes en 1996 y seis veces más (3.3 millones) en 1998.
Ante la necesidad de alguna clase de cifra de consenso, las organizaciones Musulmanas lanzaron una auto acordada "adivinaestimación" de 6 millones, que este año decidieron subir a 7 millones.
Estas cifras fueron tan extensamente adoptadas (incluso por este escritor) que adquirieron cierto brillo de autoridad. Pero la repetición no transforma una conjetura en un hecho.
El problema es genérico; las organizaciones religiosas inflan comúnmente su cantidad de miembros para subir su voz en el estrado público.
Afortunadamente, la niebla de la imprecisión finalmente se levantó la semana pasada, con la aparición de dos estudios con autoridad de demógrafos altamente consultados. (Cada estudio confió en la auto-identificación religiosa de los encuestados). De manera interesante, convinieron en un número muy similar, uno mucho más pequeño que la vieja adivinaestimación.
La American Religious Identification Survey 2001 realizada por el Graduate Center of the City University of New York preguntó a más de 50.000 personas y halló que la población Musulmana Americana total es de 1,8 millones.
Mientras tanto, el Tom Smith de la University of Chicago repasó encuestas nacionales anteriores y (en un estudio patrocinado por el American Jewish Committee) encontró que la mejor estimación coloca a la población Musulmana del 2000 en 1.886.000 personas. (Con un gesto hacia las cifras proporcionadas por las organizaciones Islámicas, estuvo deacuerdo en que este número podría llegar a los 2.814.000 Musulmanes).
Es otras palabras, dos estudios de peso realizados por eruditos encontraron que la cifra de Americanos Musulmanes se encuentra por debajo de los 2 millones - menos de un tercio del número que hasta ahora era consenso.
A esto, los grupos militantes Islámicos en Washington - vistos extensa pero erróneamente como representantes de los Americanos Musulmanes - respondieron con una hipérbola predecible. El Council on American-Islamic Relations (CAIR) acusó furiosamente al informe de Smith de trabaja "para bloquear la participación política Musulmana".
El American Muslim Council (AMC) acusó a Smith de nada menos que intentar "negar la existencia de 4 millones y medio de Americanos Musulmanes" y le culparon de "rasgar el mismo corazón de América".
El AMC también clamó increíblemente que su propia estimación de "más de 7 millones de Musulmanes" venía de cifras del Census del 2000 - pensando erróneamente que el Census pregunta por la religión.
Oh, y ése es el mismo AMC que en 1992 presionó a un investigador llamado Fareed Núman para que encontrara 6 millones de Musulmanes en el país; Nu'man atestiguó más adelante que contabilizó apenas 3 millones y fue despedido por el AMC cuando rechazó hinchar su cifra por encima de los 5 millones.
¿Por qué insiste el lobby militante Islámico en las cifras de entre 6 y 7 millones?. Porque un número más grande, incluso si es fraudulento, ofrece mayor acceso y efecto. Convencer al Partido Republicano de que los Musulmanes andan por los 8 millones, por ejemplo, condujo a llamadas urgentes de su presidente para "reunirse con líderes (Musulmanes)", algo que se convierte en menos de una prioridad cuando la población Musulmana resulta ser mucho más pequeña.
Saber el número real de Musulmanes impedirá, casi inmediatamente, do esfuerzos Islámicos militantes ahora en marcha: uno (impulsado por la revista The Minaret) para conseguir que los Americanos reconozcan que sus propias acciones causaron parcialmente las atrocidades del 11 de Septiembre; y otro (conducidos por CAIR) para detener la campaña militar de los Estados Unidos en Afganistán. Las implicaciones siguientes serán más significativas.