"El programa más estúpido que el gobierno estadounidense ha emprendido nunca" es como llamé el año pasado a los esfuerzos estadounidenses por mejorar la capacidad militar de la Autoridad Palestina (AP).Ligeramente exagerado, sí, pero la descripción se ajusta porque esos esfuerzos mejoran la capacidad de combate de los enemigos de Estados Unidos y de su aliado israelí.
Miembros de las Fuerzas de Seguridad Nacional palestinas. |
Poco después de que Yasser Arafat falleciera a finales de 2004, el gobierno estadounidense creó la Oficina del Coordinador de Seguridad para reformar, reclutar, entrenar y equipar a las milicias de la AP (llamadas Fuerzas de Seguridad Nacional o Quwwat al-Amn al-Watani) y hacerlas políticamente justificables. Durante casi toda su existencia, la oficina ha estado dirigida por el Teniente General Keith Dayton. Desde 2007, el contribuyente estadounidense la ha financiado a un ritmo de 100 millones al año. Muchas agencias del gobierno estadounidense han participado en el programa, entre ellas la Oficina de Seguridad Diplomática del Departamento de Estado, el servicio secreto o ramas del ejército.
La milicia de la Autoridad Palestina tiene alrededor de 30.000 efectivos, de los cuales cuatro batallones de 2.100 soldados han superado el control por no tener vínculos terroristas ni antecedentes delictivos y se han sometido a 1.400 horas de entrenamiento en unas instalaciones estadounidenses en Jordania. Allí estudian materias que van desde tácticas de incursión a pequeña escala e investigaciones forenses a primeros auxilios y derechos humanos.
Con el permiso de Israel, estas tropas se han desplegado en zonas de Hebrón, Jenín y Nablús. Hasta el momento este experimento ha salido bien, lo que despierta la admiración generalizada. El Senador John Kerry (Demócrata de Massachussets) llama al programa "muy alentador", y Thomas Friedman del New York Times descubre en las tropas de entrenamiento estadounidense un posible "socio de paz palestino para Israel" tomando forma.
Mirando al futuro sin embargo, predigo que esas tropas serán más probablemente un rival de guerra que un socio de paz para Israel. Considere el probable papel de las tropas en varios escenarios:
No hay estado palestino: Dayton llama orgullosamente a las fuerzas entrenadas por Estados Unidos "fundadores de un estado palestino", una entidad que espera sea real en 2011.¿Qué pasa si - como ha ocurrido muchas veces antes - el estado palestino no es una realidad en la fecha prevista? Dayton en persona advierte "grandes riesgos", lo que probablemente significa que sus tropas recién formadas empezarán a dirigir sus habilidades militares contra Israel.
Hay estado palestino: la Autoridad Palestina nunca ha cejado en su empeño de destruir Israel, como un breve vistazo a la documentación recopilada por Palestinian Media Watch evidencia. Si la Autoridad Palestina se convierte en estado, es seguro que va a perseguir su objetivo histórico - sólo que ahora estará equipada con un arsenal a estrenar y efectivos entrenados por los americanos.
La Autoridad Palestina derrota a Hamás: por la misma razón, en el improbable caso de que la Autoridad Palestina prevalezca sobre Hamás, incorporará a los efectivos de Hamás en su propia milicia y a continuación ordenará a sus tropas combinadas atacar Israel. Las organizaciones rivales pueden ser distintas en su enfoque, sus métodos y sus dirigentes, pero comparten el objetivo primordial de eliminar a Israel.
Hamás derrota a la Autoridad Palestina: si la Autoridad Palestina sucumbe a Hamás, absorberá al menor parte de los "hombres de Dayton" en su propia milicia y los desplegará en un esfuerzo por eliminar al estado judío.
Hamás y la Autoridad Palestina cooperan: a pesar de que Dayton imagina estar preparando un ejército para combatir a Hamás, la dirección de la Autoridad Palestina está participando en las negociaciones con Hamás auspiciadas por Egipto sobre la distribución del poder - agitando el fantasma de que las fuerzas entrenadas por Estados Unidos y Hamás coordinen ataques contra Israel.
La ley de las consecuencias imprevistas brinda un consuelo temporal: a medida que Washington apoya a las fuerzas de la Autoridad Palestina y Teherán patrocina a Hamás, las fuerzas palestinas están más divididas ideológicamente, debilitando quizá su capacidad global de causar daños a Israel.
Cierto, los efectivos de Dayton se comportan en la actualidad. Pero con independencia de lo que traiga el futuro - estado sí, estado no, Hamás derrota a la AP, la AP derrota a Hamás, o los dos cooperan -- estos milicianos volverán eventualmente sus armas contra Israel. Cuando eso suceda, Dayton y los genios que de forma idealista amasan las fuerzas del enemigo de Israel probablemente se encogerán de hombros y dirán: "Nadie podría haber previsto este resultado".
No es así: algunos de nosotros sí y lo estamos advirtiendo. Más íntimamente, algunos de nosotros entendemos que el proceso de Oslo de 1993 no puso fin a la intención de los dirigentes palestinos de eliminar a Israel.
La misión de Dayton debe ser detenida antes de que cause más daño. El Congreso debe suspender de inmediato toda la financiación de la Oficina del Coordinador de Seguridad.