Sus numerosos seguidores le consideran casi como un profeta por haber pronosticado el 11-S y por su discurso rotundo sobre el tema que encabeza muchas de sus conferencias, "Islamismo, terrorismo y Occidente". Sus enemigos -también numerosos- le llaman islamófobo.
El analista norteamericano y director del Middle East Forum, Daniel Pipes, es algo más que todo eso. Sus charlas son seguidas por centenares de personas en los auditorios y otros miles a través de Internet. Se le puede elogiar o criticar pero lo que no hay duda es que habla sin miedo. Una característica ajena a muchos dirigentes del siglo XXI.
"La clave no es lo que los islamistas quieren hacer sino que en Occidente seamos conscientes lo que quieren hacer. Me satisface que haya cada vez más personas que entienden lo que es el islamismo y la Yihad. No se puede derrotar al enemigo sin definirlo antes. Si tienes miedo incluso a la hora de definirlo, ¿cómo vas a frenarlo?", nos pregunta Pipes en Herzliya, al norte de Tel Aviv, tras participar en un Forum sobre terrorismo.
Aunque algunos le llaman neocon, ataca por ejemplo la política exterior del ex presidente George W. Bush. Claro que su opinión sobre Barack Obama es peor. ¿José Luís Rodríguez Zapatero? El norteamericano reconoce que no conoce en profundidad la realidad española pero cree, resumiendo coloquialmente, que los islamistas están contentos con el presidente español.
Pregunta. ¿Habla de miedo al islamismo?
Respuesta. Hay miedo a que los islamistas se ofendan y se enfaden con nosotros y lo que pueden hacer. Sólo tiene que ver que ha pasado en mi país con los coranes. Creo que quemar un libro es totalmente incorrecto y no muy inteligente pero en Estados Unidos es un acto legal. Sin embargo, aparece Obama y dice: 'Usted no puede quemar este libro porque tengo miedo de las consecuencias'. Actúa reforzando la Sharia (Ley Islámica) al decir, 'no debes quemarlo porque va en contra de la Sharia'.
P. ¿Está llamando cobarde a Obama?
R. Obama tiene mucho miedo. Mi filosofía es decir 'nosotros somos quienes somos y ustedes deben respetarnos'. La filosofía de Obama es que 'somos nosotros los que debemos respetarles y entenderles'.
P. En la conferencia, ha dedicado mucho tiempo a cómo se explican los actos de terror...
R. Cuando los musulmanes ejercen la violencia, en Occidente preferimos hablar de razones económicas, que el agresor estaba loco, que tenía problemas sociales, su matrimonio no iba bien, etc. Pero no hay que obviar el factor de la Yihad. Los líderes occidentales no quieren hablar de este tema porque no quieren disgustar a los musulmanes y convertirles en yihadistas. Hay que decir las cosas por su nombre 'terrorismo islamista'. Pero hay que distinguir entre el Islam y el islamismo que es un movimiento extremista que desea instaurar su ley en el conjunto de la sociedad.
P. ¿Qué diferencias ve entre Obama y Bush?
R. No hay grandes diferencias en especial en temas como Islam, Irak, terrorismo, Irán, Turquía e Israel. En este caso, la diferencia puede ser que Obama se centra en Jerusalén y Cisjordania además de intentar recabar el apoyo de los países árabes. Bush ni lo intentó.
P. ¿Tiene futuro el diálogo renovado entre israelíes y palestinos?
R. Es un chiste ya que nadie lo quiere. Sólo Obama. Los israelíes no creen que salga un acuerdo. Los palestinos no sólo no creen sino que tampoco lo desean. Pero ¿quién es Abu Mazen? Controla un territorio del tamaño de esta sala. Hamas evidentemente no desea la paz. Es una vieja película. La definición de un estúpido es alguien que hace las cosas mal una y otra vez. Si no funciona una o dos veces, ¿por qué va hacerlo a la tercera?
P. Muchos culpan a Bush del aumento de inestabilidad en la región mientras Al Qaeda sigue nutriéndose de extremistas...
R. Los ataques a Irak y Afganistán fueron una decisión correcta. Lo que estaba mal fue intentar arreglar el caos en esos países. Debimos entrar, derrocar a Saddam y los talibanes y retirarnos. El error no fue ir sino quedarse.
P. ¿Qué opina de la construcción de la Mezquita cerca de la zona cero en Nueva York?
R. No me importa mucho aunque a fin de cuentas estoy en contra. No es un tema prioritario sino simbólico. Occidente sigue centrándose en los símbolos como la vestimenta islámica en las escuelas de Francia, los minaretes en Suiza o las caricaturas en Dinamarca. El verdadero asunto es si aceptamos la ley islámica, la poligamia, la supremacía del Islam, que nos prohíban expresarnos por miedo a las represalias.
P. Habla también de la alianza de cierta izquierda europea con grupos islamistas...
R. La base de esta alianza es que no les gusta la civilización tradicional occidental. No comparten casi nada pero tienen un enemigo común. A primera vista se puede simbolizar en Israel o Estados Unidos de Bush pero su enemigo es mucho más profundo: la cultura y vida de Occidente.
P. En Europa, la inmigración es una cuestión cada vez más polémica...
R. Su continente afronta un grave problema. Tienen tres opciones. La primera, que todos asuman la ley, no la veo cercana desgraciadamente. La segunda opción se llama Eurabia con más leyes islámicas, una Europa musulmana con Londonstan, Al Andalus... La última opción es que digamos 'basta', no queremos que la Sharia domine nuestras sociedades.
P. ¿En esta última opción, no le pueden llamar xenófobo?
R. Yo sólo digo que no debemos permitir vivir bajo la ley islámica.
P. ¿España?
R. Zapatero está dando pasos que los islamistas aprueban y a largo plazo podría acercar el sueño de Al Andalus. No digo que pase pronto, por supuesto, pero es un sueño muy vivo. En uno de sus primeros discursos tras el 11-S, Bin Laden se refirió Al Andalus y Hamas tiene textos escolares donde explica que el sueño es volver a Al Andalus.