Pregunta planteada a los columnistas del Jerusalem Post: "Mientras los proyectiles Kassam siguen castigando Sderot, el Ministro Haim Ramón ha sugerido responder a las salvas suspendiendo el abastecimiento vital de infraestructuras como el agua, la luz y la gasolina a Gaza durante un margen de tiempo concreto, si bien 'el precio' de tales medidas quedará 'determinado por Hamás y sus acciones'. ¿Cuál es su opinión de esta propuesta?" Para consultar todas las respuestas, visite "Cuestiones candentes #34: ¿Cortar la luz a Gaza?"
Convencido de que si no se desea ganar una guerra, se pierde, animo desde hace tiempo al gobierno israelí a adoptar medidas más asertivas en respuesta a los ataques.
En un artículo del Jerusalem Post publicado hace seis años, Prevenir la guerra: las opciones de Israel, instaba a cortar el abastecimiento a la Autoridad Palestina dentro de un abanico de medidas adicionales, como no permitir el transporte de bienes o personas más allá de las necesidades básicas dentro de los territorios de la Autoridad Palestina, implantar la pena de muerte contra los asesinos y registrar los municipios desde los que se realicen ataques.
Como ayer, hoy tales respuestas presentan dos ventajas: En primer lugar, trasladan un firme mensaje de disuasión, "golpéanos y te golpearemos mucho más", reduciendo así el número de ataques a corto plazo. En segundo lugar, impresionan a los palestinos con la voluntad israelí de supervivencia, y por eso aproximan su eventual aceptación del estado judío.
En cuanto a la inevitable protesta que generará esa dura medida hacia Israel, la respuesta es fácil: allá en los tiempos en los que el ejército israelí empleaba tácticas disuasorias, el país disfrutaba de una posición internacional mucho mejor. Desde 1993, su debilidad no sólo le ha granjeado desprecio sino mayor hostilidad.
Por ahora, sin embargo, una política de disuasión sigue siendo algo distante, dado que se rumorea que el Primer Ministro Olmert sería contrario a suspender servicios por ser "castigo colectivo". Y por esa razón los asaltos palestinos continuarán.
20 de septiembre de 2007: En apariencia, la crónica de que Olmert es contrario a esta opción era errónea. Del Independent de ayer:
El gabinete israelí de seguridad ha declarado "territorio hostil" la Franja de Gaza, controlada por Hamás, y apoyado formalmente la política de suspender el abastecimiento de combustible y electricidad a la Franja en respuesta a los constantes ataques balísticos de militantes palestinos. … La declaración difundida por la oficina del Primer Ministro israelí tras el encuentro de ayer, reza: "Hamás es una organización terrorista que se ha hecho con el control de la Franja de Gaza y lo ha convertido en territorio hostil. Esta organización participa de actividades hostiles contra el Estado de Israel y su ciudadanía, y ostenta la autoría de estas actividades... Se implantarán sanciones adicionales al régimen de Hamás limitando el tránsito de diversos bienes a la Franja de Gaza y reduciendo el abastecimiento de luz y electricidad". La decisión es otra medida de un proceso que comenzó el mes pasado, cuando el gabinete israelí se decantó en contra de una invasión militar a gran escala de Gaza pero examinó formas de suspender el abastecimiento. El gabinete se decantó ayer en contra de la suspensión del abastecimiento hidráulico.
6 de enero de 2008: Kanan Obeid, presidente de la autoridad energética de Gaza, dice que los israelíes han empezado a reducir a la mitad el abastecimiento de combustible a la única central eléctrica de Gaza, alrededor de cuatros meses después de que la idea circulara por primera vez. Teniendo en cuenta que la totalidad del combustible de Gaza sale de Israel y que el ejército israelí ha desmantelado un buen número de transformadores eléctricos, Gaza solamente dispone del 35% de la luz necesaria. Se espera que la falta de combustible genere apagones de ocho horas al día. Bienes y servicios vitales, sin embargo, seguirán abastecidos. David Baker, un portavoz del gobierno israelí, afirmó que "se ingenia para presionar a los terroristas para que detengan" el lanzamiento de proyectiles.
