El Pew Research Center, una filial de Pew Charitable Trusts, cuenta con los recursos para realizar sondeos con frecuencia sin precedentes y a una escala masiva. A lo largo de la última década, ha utilizado sus fondos para recabar las posturas musulmanas hacia el islamismo en general, hacia grupos terroristas concretos en particular y también hacia el terrorismo suicida. El estudio más reciente, "Auge de inquietudes motivadas por el fundamentalismo islámico en Oriente Próximo", publicado el 1 de julio y llevado a cabo entre 14.244 encuestados de 14 países entre el 10 de abril y el 25 de mayo de 2014, reviste gran interés. Pew resume las conclusiones generales:
A medida que los conocidos episodios de violencia entre rivales asolan Oriente Próximo, África y el subcontinente hindú, de guerras civiles a atentados suicida, la inquietud a tenor del fundamentalismo islámico es elevada entre los países de poblaciones musulmanas importantes… y en Oriente Próximo, la preocupación crece. Libaneses, tunecinos, egipcios, jordanos y turcos se muestran por separado más preocupados por la amenaza fundamentalista que hace un año. Mientras tanto, las opiniones públicas albergan opiniones muy negativas de grupos fundamentalistas famosos, como al Qaeda, Hamás o Hezbolá.
En mi interpretación, el sondeo expone dos conclusiones relevantes y también ofrece algunos focos de interés menor:
(1) Cuanto mejor conocen el islamismo los musulmanes, más los rechazan. Esta temática está presente entre las cifras de los sondeos comparadas a lo largo del tiempo. A medida que el islamismo ha ido proliferando durante la última década, el apoyo musulmán a ello se ha contraído prácticamente en todas las franjas, mostrando los datos del pasado año una contracción particularmente dramática.
Gráfico 1, "Creciente preocupación por el fundamentalismo en Oriente Próximo", muestra un incremento medio de 9,4 enteros porcentuales en la opinión anti-islamista en un sólo año, de 2013 a 2014:
Gráfico 2, a excepción del Líbano, el más distante, "Opiniones desfavorables de Hezbolá crecen en Oriente Próximo; se mantienen en el Líbano" descubre un incremento medio del 34 por ciento en la impopularidad de Hezbolá en los cuatro países sondeados desde 2007.
Gráfico 3, "Opinión positiva palestina de Hamás decrece" registra prácticamente la inversión de los datos de 2007 al presente, del 62 por ciento de opiniones positivas y el 33 por ciento de opiniones negativas al 35 por ciento y 53 por ciento, respectivamente.
Gráfico 4, "Intensidad del apoyo al terrorismo suicida a lo largo del tiempo" muestra un descenso decidido pero desigual en el apoyo a esta repugnante táctica.
Comentarios: Sea la cuestión el islamismo en general, las opiniones de Hezbolá, de Hamás o los atentados suicida, el apoyo musulmán se reduce de forma sustancial, confirmando mi tesis, expuesta por primera vez hace un año, de que El islamismo ha tocado máximos y está de capa caída.
(2) Las tres poblaciones palestinas de Cisjordania, Gaza y los árabes israelíes difieren entre sí en muchos sentidos:
De todos los grupos musulmanes sondeados, los cisjordanos y los gazatíes albergan la opinión más favorable de Al-Qaeda, en el 26 por ciento; extrapolando a partir del juego de datos incompletos que ofrece Pew, parece que sólo el 6 por ciento de los árabes israelíes más o menos serían partidarios de Al-Qaeda, una diferencia sustancial.
De igual manera, los palestinos apoyan el terrorismo suicida más que ningún otro colectivo de Oriente Próximo, siendo el apoyo extrañamente más elevado (el 62 por ciento) entre los gazatíes que entre los cisjordanos (el 36 por ciento). Los árabes israelíes vuelven a ser partidarios de esta táctica en cifras muy inferiores (el 16 por ciento).
Cisjordanos y gazatíes son partidarios de Hamás de forma comparable; pero los gazatíes, que han experimentado su gestión de primera mano, se muestran mucho más negativos en su opinión de la organización. Encuestados por el islamismo en general, los gazatíes vuelven a mostrarse mucho más negativos (el 79 por ciento) que los cisjordanos (el 57 por ciento).
Comentarios: El sondeo Pew confirma que los palestinos son la población más fanatizada de Oriente Próximo, por no decir del mundo, dispuesta a prescindir de lo que haga falta y probar cualquier experimento descabellado. Durante el último siglo han intentado cuatro: el nacionalismo pan-sirio, el nacionalismo panárabe, el nacionalismo palestino y el islamismo. Tiemblo al pensar lo que se les ocurrirá ahora. Dicho eso, los árabes israelíes se diferencian de forma sustancial de sus parientes no israelíes.
Otros reveladores focos de interés:
Los atentados tenaces del Boko Haram contra correligionarios musulmanes de Nigeria conducen a la anómala conclusión de que los musulmanes de aquel país superan a los cristianos (el 76 por ciento frente al 69 por ciento) al albergar niveles elevados de preocupación por el islamismo.
Todavía más aberrante es que el 31 por ciento de los cristianos libaneses sean partidarios de Hezbolá, en comparación con tan sólo el 9 por ciento de los musulmanes sunitas. (Los musulmanes chiítas son partidarios del grupo por un aplastante 86 por ciento).
Comentarios: En un giro que podría ser augurio, en ocasiones los musulmanes son más anti-islamistas que los cristianos.
Por último, pocos sondeos concluyen con un 100 por ciento de acuerdo en algo, pero los judíos israelíes son contrarios de manera unánime a Hezbolá y a Hamás. Una muestra estadística que de forma así de armónica revela un acuerdo integral en torno a una materia no sorprenderá nada a cualquiera que conozca a los judíos de Israel. (14 de julio de 2014)