Miembros del Middle East Council se reunieron el día 9 de diciembre de 1992 con Nizar Hamdoon, representante iraquí permanente ante las Naciones Unidas en Nueva York y principal diplomático de aquél país en el extranjero, en la legación iraquí.
Entre otras cosas, escuchamos un buen número de indicadores receptivos durante el transcurso del encuentro. Al dar lectura a los siguientes pronunciamientos del embajador Hamdoon, no obstante, hay que recordar el viejo adagio que dice que un diplomático es alguien remunerado por mentir en nombre de su país.
¿Por qué no se retiraron parcialmente de Kuwáit los iraquíes antes del 15 de enero de 1991? Porque Sadam era escéptico con que los americanos fueran realmente a la guerra; y si lo hacían, estaba convencido de que las primeras bajas mirarían su voluntad de continuar. Lo sucedido realmente, en resumen, fue una sorpresa monumental.
El gobierno iraquí controla "más de las dos terceras partes" de Irak.
Saddam Husayn atacó a Israel para obtener el apoyo árabe. La paz con Israel será posible como parte de un acuerdo regional.
Bagdad debería eventualmente de prepararse para implantar medidas de confianza, incluyendo el proceso de paz con Israel y otras cuestiones regionales, los asuntos del crudo, los derechos humanos, las elecciones y la redacción de un texto constitucional.
Bagdad acepta las actuales inspecciones de las Naciones Unidas pero aspira a que se levante el régimen de sanciones. Irak no volverá a los arsenales nucleares "ni a todas esas cosas".
La tenaz reivindicación de Kuwáit como decimonovena provincia de Irak procede exclusivamente de los medios, no de instancias oficiales, y por esa razón no es representativa de la política gubernamental.
Los kurdos habrán de negociar eventualmente con Bagdad, en parte porque el gobierno estadounidense volverá a decepcionarles.
21 de septiembre de 2003: Publico hoy la "Necrológica de Nizar Hamdoon (1944-2003)" en el Middle East Quarterly.
