El Consejo Musulmán de Asuntos Públicos y el Consejo de Relaciones Americano-Islámicas tienen un problema cada uno. En calidad de las dos organizaciones islamistas más destacadas y activas en los Estados Unidos, tienen unos rasgos distintivos ideológicos y estilísticos, pero trabajan juntos eficazmente como desgracias que nunca vienen solas. Su problema se refiere a dos de sus más destacados empleados, Edina Lekovic, del Consejo Musulmán de Asuntos Públicos (MPAC), y Hussam Ayloush, del Consejo de Relaciones Americano-Islámicas (CAIR).
Edina Lekovic |
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STEVEN EMERSON: … este [texto] es algo con lo que Edina Lekovic debe estar muy familiarizada. "Cuando escuchemos a alguien referirse al gran Mujahid…, Osama bin Laden, como ‘un terrorista', deberíamos defender a nuestro hermano y referirnos a él como luchador de la libertad; alguien que ha renunciado a la riqueza y al poder para combatir por la causa de Alá y hablar contra los opresores". Estas declaraciones se hicieron tras el atentado del 98 [en Kenia y Tanzania], y se hicieron en la revista Al-Talib.
EDINA LEKOVIC: Eso es absolutamente absurdo.
EMERSON: Y era la de Edina - ella era la editora de la revista Al-Talib cuando se hicieron esos comentarios.
LEKOVIC: Absolutamente no. No, yo no lo era. Esto son mentiras.
EMERSON: No lo son. Usted era la editora.
LEKOVIC: No, éstas son absolutas manipulaciones. Sr. Emerson, su investigación está cogida con alfileres.
EMERSON: No, usted era la editora general de la publicación.
LEKOVIC: Su investigación está cogida con alfileres.
EMERSON: No. ¿No era usted la editora general de esa publicación?
LEKOVIC: Y qué más - no. No, yo no lo era.
EMERSON: ¿Usted no lo era?
LEKOVIC: Según su investigación...
EMERSON: ¿No aparece usted en la lista de integrantes de la plantilla como editora general?
LEKOVIC: Que su investigación. Que su investigación señale y lleve a cabo este tipo de difamación obsesiva contra alguien es bastante ridículo.
EMERSON: Espere. Edina, ¿era usted la editora general?
LEKOVIC: De qué hablamos aquí...
EMERSON: Edina, ¿era usted la editora general de la revista Al-Talib?
LEKOVIC: Yo era estudiante de la UCLA y fui la editora del Daily Bruin.
LAWRENCE KUDLOW: Vale, vamos a tener que marcharnos - vamos a tener que dejarlo aquí.
LEKOVIC: De modo que ese era el periódico del campus. De qué estamos hablando aquí…
Avanzado el día, Emerson proporcionaba pruebas documentales de su afirmación en "¿MPAC niega la radicalización de los jóvenes musulmanes?":
en julio de 1999, ella aparece claramente enumerada como Editora General de Al-Talib, en la esquina superior izquierda. Esta columna fue publicada casi un año entero después de los atentados de las embajadas en Kenia y Tanzania. En este punto, el papel de Bin-Laden en estos atentados era amplia y públicamente conocido.
Haga clic en el hípervínculo al número de julio de 1999 de Al-Talib: el noticiero musulmán de la UCLA. La lista del personal de la publicación enumera a Edina Lekovic como uno de los dos editores generales. Y el texto, firmado por "la plantilla de Al-Talib", tiene el pasaje que citaba Emerson: "Cuando escuchemos a alguien aludir al gran Mujahid …, Osama bin Laden, como ‘un terrorista', deberíamos defender a nuestro hermano y aludir a él como un luchador de la libertad".
Tales opiniones no son una sorpresa tan grande, puesto que Al-Talib ha sido vinculada a una página web de Al-Qaeda, http://www.qoqaz.com/, y es publicada por la rama de la Asociación Musulmana Estudiantil de la Universidad de California en Los Angeles. (Escribiendo para el Middle East Quarterly, Jonathan Dowd-Gailey llamaba a la Asociación Estudiantil Musulmana una voz que "desposa el wahabismo, el antiamericanismo y el antisemitismo, agitando agresivamente contra la política norteamericana en Oriente Medio, y expresando solidaridad con las ideologías islamistas militantes").
Steven Emerson |
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Oh, ¿de veras? Desafortunadamente para Lekovic, Emerson está curtido de números de Al-Talib. Entre octubre de 1997 y mayo de 2002, resulta que su nombre aparece al menos otras 11 veces en la lista de integrantes de la plantilla, en cargos tales como "editora general", "editora asistente", "editora auxiliar", "redactora", como receptora de "agradecimientos especiales". Y resulta que algunos números de la revista contienen otras opiniones notorias.
- • Lekovic aparece enumerada como editora asistente del número de septiembre de 1999 en el que el artículo, "El jeque ‘Umar ‘Abd al-Rahmán - Torturado en una celda", afirma que el jeque ciego fue "acusado falsamente" de tener un papel en el atenta de 1993 contra el World Trade Center.
- • Aparece enumerada como editora general del número de mayo de 1999 en el que un artículo acerca de "La comercialización del Holocausto" afirma que "por supuesto existen librerías de evidencias abrumadoras que indican que las cifras, relatos y narrativas [del Holocausto] o bien son exageradas, o bien en algunos casos son completamente imaginarias".
La lista de integrantes de la plantilla editorial revela además conexiones entre el Consejo Musulmán de Asuntos Públicos (MPAC) y Al-Talib. El número de diciembre de 1997, por ejemplo, enumera a Aslam Abdaláh, ex vicepresidente del MPAC, como redactor, al tiempo que extiende "expresivas gracias" a Maher Hathout, asesor veterano del MPAC.
De modo que, MPAC, ¿ahora qué? Tras el desgraciado episodio de Edina Lekovic, su permanencia entre el personal significa que implícitamente aprueba las invenciones de ella, llama a Osama bin Laden "un luchador de la libertad", exonera al jeque ciego, y promueve la ridiculización del Holocausto.
El Consejo de Relaciones Americano-Islámicas entra en escena porque esa lista de julio de 1999 del personal de Al-Talib también extiende "expresivas gracias" a Hussam Ayloush, director durante mucho tiempo de su sede en el sur de California. ¿Ahora qué, CAIR? Esta información también lo vincula negando el terrorismo de bin Laden; por favor, que explique el papel de Ayloush en el número de julio de 1999.
Que estos dos particulares trabajen en cargos importantes del MPAC y de CAIR revela la verdadera naturaleza de esas organizaciones, normalmente oculta a occidentales impresionables. En evidencia ahora, si estos empleados marcados permanecen en sus puestos, implican a sus instituciones en las mentiras, en la adulación a bin Laden, la exculpación del jeque ciego, y la ridiculización del Holocausto. Prestemos atención para ver los siguientes movimientos.